jueves, 18 de junio de 2009

Seda y pedrería en aguas limpias


Si os dedicáis a la pesca deportiva seguramente conozcáis las "moscas", esos cebos artificiales con pelillos que resultan irresistibles a los peces. Pues bien, esos cebos están inspirados en los tricópteros, un orden de insectos que agrupa a unas 9.000 especies, y que se caracterizan por la pilosidad que presentan las alas de los adultos.

Los tricópteros adultos sirven de alimento a una gran variedad de depredadores acuáticos, de ahí el éxito de la utilización de cebos artificiales reproduciendo su morfología. Sin embargo su fase larvaria es acuática, y posee una cabeza bien diferenciada y dos uñas en la parte posterior. En este estadio construyen estuches uniendo con seda los granos de arena del fondo que les sirven de protección durante su metamorfosis (en la imagen, varios estuches larvarios adheridos a una piedra).

Las larvas forman parte fundamental de la dieta de especies tan singulares como el desmán de los Pirineos (Galemys pyrenaicus), el mirlo acuático (Cinclus cinclus), o la trucha de río (Salmo trutta). Al tratarse de insectos que necesitan aguas muy limpias, encontrar estos característicos estuches es indicio de la gran calidad de las aguas, es decir, los tricopteros son bioindicadores de la calidad del agua.

martes, 16 de junio de 2009

La flecha azul

En cualquier arroyuelo, o río con densa vegetación de ribera y aguas limpias, es posible que nos sorprenda un flechazo azul que pasa por delante de nuestros ojos, sin que tengamos tiempo de identificar de qué se trata. Pues es sin duda un martín pescador (Alcedo athis).

Esta ave se reconoce por tener un llamativo plumaje de color azul eléctrico en el dorso, y un naranja muy vivo en el vientre, unas patas rojas cortas. Pero lo que seguramente llama más la atención es que tiene un pico de un tamaño desproporcionado en comparación con el resto del cuerpo.

Su cuerpo en forma de huso, y su enorme pico son un indicativo de la forma de alimentación a la que hace mención su nombre. Acecha a pequeños peces desde las ramas que dan al agua, y al divisarlos se zambulle a una velocidad increíble, y regresa a la percha desde la que salió, para engullir su presa. Parece simple, pero desde el aire tiene que corregir instantáneamente el efecto de la difracción del agua y sumergirse en el lugar exacto donde está su presa.

Aquí tenéis un
vídeo para ver cómo se alimenta, y de paso ver cómo se las ingenian los fotógrafos para obtener imágenes de los lances de esta ave:

A partir de ahora si veis una flecha azul cerca de un río...ya sabéis de quién se trata.




miércoles, 10 de junio de 2009

Los hongos hacen el agosto


Que el cambio climático es una realidad, cada vez es más evidente. Sus efectos se extienden rápidamente, y con el aumento de la temperatura y la humedad del aire, se propicia la propagación de ciertas enfermedades, como por ejemplo la quitridiomicosis, causada por un hongo (Batrachochytrium dendrobatidis) que está diezmando las poblaciones mundiales de anfibios;

Seguramente por este mismo motivo podría propagarse fácilmente el chancro del Castaño, otra enfermedad fúngica (Cryphonectria parasitica) que está en auge. Hay regiones especialmente sensibles a este ataque, por ejemplo la región del Bierzo, cuyas castañas tienen denominación de origen, y que ve peligrar no solo su cultivo, sino los ejemplares centenarios de castaño que han sido testigos mudos de la historia de la comarca.
Algunas plagas de insectos también hacen el agosto, como la lagarta del pino (Thaumetopoea pityocampa) que con el incremento progresivo de la temperatura va ampliando su distribución, y coloniza manchas boscosas a las que antes no tenía acceso.

Por eso cuando oigamos hablar de cambio climático, no hay que pensar en cataclismos al estilo de Hollywood, sino en efectos silenciosos, que van propagandose con facilidad ante nuestros ojos.


Fotografía: isftic (Autor: Jorge Martin Huelves)

lunes, 8 de junio de 2009

Las orillas vuelven a estar marcadas


Desde hace unos días se ha colado en los medios de comunicación un mamífero del que todo el mundo ha oído hablar pero que casi nadie ha tenido la oportunidad de ver el estado salvaje (ojo, no confundir con el visón americano, escapado de granjas peleteras). Me refiero a la nutria, Lutra lutra.

Y es que este fantástico nadador es noticia por haber recolonizado gran parte del territorio peninsular que perdió en su lucha contra los contaminantes acuáticos y por la persecución a la que se vio sometida por parte de peleteros y pescadores, que la veían como una competidora.

Sin embargo la nutria que desde los años 70 se considearba "amenazada" ha vuelto a colonizar áreas de ribera, y sus poblaciones han aumentado significativamente gracias a los esfuerzos realizados en labores de conservación, recuperación y el fomento de la calidad ambiental de los ecosistemas acuáticos continentales
Por ellos cada vez es más habitual descubrir excrementos en las piedras y tocones a orillas de nuestros ríos y arroyos. Son los "cagarruteros", es decir lugares donde las nutrias depositan sus excrementos para marcar su territorio.

Nuestros ecosistemas acuáticos y en general nuestra biodiversidad, están de enhorabuena. Pero hay que seguir trabajando, y no bajar la guardia para que especies tan representativas de la biodiversidad ibérica no vuelvan a verse amenazadas, y que esta recuperación sirva de incentivo para la correcta gestión.

viernes, 5 de junio de 2009

¿Nieve de chopo?


Todos los años en primavera se produce un fenómeno curioso que nos recuerda a las nieves invernales pero nada más lejos de la realidad. Me refiero a esa capa blanca que se extiede allí donde hay chopos, por ejemplo en parques, riberas... Y llega la polémica sobre las alergias y el polen... Seguro que habéis escuchado por la calle ¿por qué plantan chopos si hay tanto alergico al polen?

En primer lugar debemos distinguir polen de semilla; el polen es lel gameto masculino equivalente a nuestros espermatozoides, que producen las flores masculinas. Los granos de polen. (por lo general microscópicos) una vez en contacto con el pistilo (la parte femenina de la flor) producen la polinización, y de ahí se obtiene un fruto que contiene las semillas. Estas semillas, tras un proceso de dispersión, pueden germinar y originar una nueva planta. Los chopos son dioicos, es decir, hay árboles macho y árboles hembra, y son estos últimos los que producen las pelusas.

La sorpresa viene cuando observamos detenidamente una de esas pelusillas de chopo, y encontramos una pequeña semilla entre las hebras. La pelusa del chopo es el equivalente a un pequeño paracaídas para ayudar a la dispersión de la semilla por el viento (anemocoria) .

Entonces la respuesta a la pregunta anterior es bien sencilla: las pelusillas blancas no son polen y los alérgicos al polen pueden estar tranquilos. La Sociedad Española de Aerobiología refiere una reacción alergica muy limitada al polen de chopo, y del mismo modo para las pelusas. Las molestias que pueden causar estas pelusas (suciedad,incendios...) tienen una solución tan fácil como la de plantar únicamente árboles macho y no plantar árboles hembra. Por tanto no debemos sentir pánico al pasear en primavera por donde haya chopos.

Foto: isftic (Jorge Martínez Huelves)

miércoles, 3 de junio de 2009

Hispania, tierra de conejos



Según los historiadores, parece muy probable que el nombre de Hispania venga del vocablo fenicio I-shepam-im, que vendría a significar algo así como isla de los conejos. Y es que desde antiguo, un símbolo de nuestra fauna ha sido este pequeño mamífero, que ha tenido un importante valor cultural, y por supuesto biológico.

Su capacidad adaptativa a los duros veranos de nuestro clima, les permiten alimentarse de pasto seco, frutos, cortezas... Esto, unido a su legendaria capacidad reproductiva, les ha convertido en uno de los pilares de los ecosistemas mediterráneos. De hecho, sólo en España hay constancia de que 40 especies distintas depredan sobre el conejo (entre las que destaca el línce ibérico).


Sin embargo el declive de esta especie empezó no hace mucho, como consecuencia de la excesiva persecución por su carne y su piel, de la destrucción de hábitats, y finalmente, una serie de enfermedades muy contagiosas (mixomatosis y fiebre vírica hemorrágica) debilitaron enormemente las poblaciones de conejo, y por extensión de sus depredadores. Pero este pequeño lagomorfo... tiene aguante para rato... afortunadamente!

Foto: fuente isftic